sábado, 23 de enero de 2016

The Descent from the Cross







Después de la terminación del régimen calvinista en Amberes en 1585, las iglesias de la ciudad estaban decorados gradualmente una vez más con las obras de arte. El proceso continuó y se intensificó en la primera parte del siglo 17, cuando los Países Bajos meridionales disfrutó de un período de estabilidad y prosperidad gracias a las políticas de paz llevadas a cabo por los archiduques Alberto e Isabel. Arte y artistas fueron los principales beneficiarios. Amberes era una ciudad rica, cuyas iglesias fueron decoradas con esplendor inusual: el culto católico debía ser especialmente glorioso en este lugar donde los protestantes cabeza dominio celebrada recientemente.




En 1611, los arcabuceros - guardia cívica de Amberes - encargó un Descendimiento de la Cruz por su ilustre paisano Rubens por su altar en la catedral. El decano de la Alianza en ese momento era burgomaestre Nicolás Rockox, que se ven en la pintura. El Descendimiento de la Cruz es el segundo de los grandes retablos de Rubens para la catedral de Amberes. Muestra la Visitación y la Presentación del templo a ambos lados de la pendiente de la cruz. (La primera tríptico de Elevación de la Cruz fue ejecutado en 1611-1612). Su rica técnica pictórica barroca incorpora ambos elementos de diseño veneciano y también la composición y la iluminación de la época romana de Caravaggio. Pero el resultado es puramente flamenca.



Aunque a primera vista los temas presentados en el tríptico parecen muy amplia, en realidad están vinculados, para St Christopher era patrona de los arcabuceros. Cuando el tríptico fue cerrado, todo lo que los fieles podían ver era la escena de la leyenda de San Cristóbal, cuyo nombre griego "Christophorus" significa "portador de Cristo". Este hecho constituye la clave de toda la pintura, en la que los amigos y las mujeres santas en el panel central, y María y Simeón en las alas son también 'portadores de Cristo'.




El Descendimiento de la Cruz
Es dentro del arte sacro un camino mas para recrear la culminación de la pasión de Cristo, ya desde el temprano renacimiento vemos obras dedicadas a este pasaje,
De ahí a que podamos admirar diferentes versiones del tema sacro




La pequeña obra que presente la Colección Cantú Y de Teresa es un ejemplo mas de la maestría y dedicación de los maestros de los Países Bajos, la disposición de las figuras asi como el manto esta muy de acuerdo con esa serie de patrones de angulos trabajados en el temprano barroco.


Adolfo Cantú

Colección Cantú Y de Teresa

sábado, 9 de enero de 2016

Pintura Alemana en la Colección de Arte Cantú Y de Teresa

Pintura Alemana
Colección de Arte Cantú Y de Teresa
Doble Retrato





Realismo es la denominación de un estilo o movimiento pictórico que se dio en Francia a mediados del siglo XIX, cuyo principal representante es Gustave Courbet. El propio pintor fue quien acuñó el término al dar nombre al pabellón que hizo construir para una provocativa exposición de 1855, alternativa al Salón de París, bajo el título "Realismo".






El gran peso del romanticismo alemán hace que la pintura realista en Alemania no se defina con claridad, identificándose con la etiqueta importada de Francia a los pintores de la segunda mitad del siglo XIX que se dedican al paisaje y al costumbrismo. Se caracterizaron por el interés por la luz y la factura preimpresionista, y algunos evolucionaron posteriormente hacia el impresionismo y las vanguardias. Entre ellos destacan Adolph von Menzel, Wilhelm Leibl, Max Liebermann, Franz von Lenbach y Hans Thoma.




viernes, 8 de enero de 2016

Enero - XXVII Aniversario Luctuoso



De muy chamaco me enamoré profundamente de mi maestra, ella descubrió en mí la inclinación por el arte mural; me llevaba de salón en salón para contar la historia del arrobo de las tierras americanas de los peregrinos de Mayflower, también los temas del Nacimiento y Navidad.
Comentario de Federico Cantú


 Enero - XXVII Aniversario Luctuoso


El 29 de Enero de 1989 fallecía en la Ciudad de México Federico Cantú Garza
Con su muerte concluía toda una época de gran esplendor en el arte plástico, Federico fue uno de los pocos artistas que pertenecieron a las tres mas grandes escuelas del siglo XX, La Escuela Mexicana , La Escuela de Paris y La Escuela de Nueva York
Gran maestro : Pintor , Grabador , Escultor, Muralista , su obra se encuentra equidistante a las manifestaciones de la época sin embargo su expresión
E iconografía dotaron de identidad a nuestra nación.





A veintisiete años de su muerte , las Colección de Arte F Cantú F & Elsa E de Cantú
Y la Colección Cantú Y de Teresa , recuerdan al maestro con una serie de exposiciones durante el 2016, incluyendo en ellas  su legado dentro de  nuevas y ricas curadurías.

Adolfo Cantú

Colección de Arte Cantú Y de Teresa








domingo, 3 de enero de 2016

Gonzalo Carrasco - en la Colección de Arte Cantú Y de Teresa






Otumba es un pequeño poblado incluido dentro del Estado de México
A lo largo de su historia ha sido  referencia histórica por la famosa batalla de Otumba que  fuera un enfrentamiento entre las fuerzas mexicas  y aliadas encabezadas por el cihuacóatl Matlatzincátzin y las de Hernán Cortés, entre las tradiciones de este pueblo también podemos reconocer sus tradicionales carreras de burros , existe un tercer hecho que la hace trascendente y es la vida y obra de uno de sus fieles hijo “El Padre Carrasco”

Gonzalo Carrasco Espinosa (Otumba, 18 de enero de 1859 - Puebla, 19 de enero de 1936) fue el único pintor jesuita mexicano nacido en el siglo XIX y activo en el siglo XX.1 Fue un destacado estudiante de la Escuela Nacional de Bellas Artes entre 1877 y 1884, pero en 1884 ingresó a la Compañía de Jesús, lo cual le fue muy criticado en el siglo XX, por ejemplo por Justino Fernández, ya que consideró que su vocación religiosa eclipsó su vocación artística.

Carrasco Nació en el seno de la familia formada por don Vicente Carrasco y doña Ana María Espinosa el 18 de enero de 1859. Fue bautizado en la Parroquia de la Purísima Concepción en Otumba .
En 1876 Gonzalo ingresó a la Escuela Nacional de Bellas Artes en la que fue un alumno destacado y distinguido con varios premios. Entre ellos en 1881 recibió el primer premio en el concurso de composición a color en la Exposición Nacional de Bellas Artes, con su cuadro Job en el estercolero. En 1883 fue premiado por el entonces presidente Porfirio Díaz en el concurso Bienal de Bellas Artes, por su obra San Luis en la peste de Roma.
Los historiadores de arte reconocen su trabajo como estudiante de la Academia de San Carlos donde fue alumno de Santiago Rebull, José Salomé Pina y José María Velasco. 

En enero de 1884 Gonzalo entró al noviciado de la Compañía de Jesús, ubicado en Michoacán y así empezó sus estudios eclesiásticos. En 1888 fue enviado a Saltillo para estudiar filosofía por tres años y después en 1891 recibió una beca para estudiar Teología en España en el Colegio de Oña; aprovechando su estancia en la península ibérica, los superiores de su orden lo enviaron a Madrid para que perfeccionara su arte. 
Durante los 52 años transcurridos entre su ingreso a la Compañía de Jesús y su muerte, Carrasco se dedicó principalmente al arte religioso que fue del gusto de sectores conservadores. Como pintor y decorador de iglesias se le contabilizan alrededor de 500 pinturas de caballete entre retratos y obras. Debido a los límites que tenía Carrasco como sacerdote, se puede encontrar la repetición de muchas de sus obras, pero en su paso por diversas iglesias se dedicó a restaurar, remodelar y pintar para lograr la mejora de cada una.

A su regreso a México, como religioso jesuita, en septiembre de 1895 participó en las tareas de embellecimiento de la Basílica de Guadalupe en la ciudad de México y pintó El primer milagro de la Virgen.
Carrasco comenzó a tener cargos importantes, en Puebla en 1902 fue rector del Colegio Católico, en México en 1907 fue superior de la Iglesia de Santa Brígida. Uno de los cargos más importantes en su carrera jesuita lo recibió en 1912, durante la Revolución mexicana, cuando fue nombrado como rector del Colegio de Tepozotlán, sin embargo en 1914 fue invadido por tropas carrancistas. El padre Carrasco y otros cuatro sacerdotes fueron desalojados de la iglesia violentamente y puestos presos en Teloyucan, atormentados por el hambre durante 6 días.
Después de ser preso por el ejército carrancista se hizo amigo personal del jefe constitucionalista, e incluso le hizo un retrato que nunca poseyó Venustiano Carranza. Apresado por el general Francisco Coss, éste le ofrece llevarlo a México y nombrarlo director de la Escuela Nacional de Bellas Artes con la condición de que negara la fe cristiana y abandonara el sacerdocio pero Carrasco se negó rotundamente y los altos sectores eclesiásticos lo enviaron a Nueva York.





En Estados Unidos, Carrasco aprovechó para pintar y vender cuadros para procurar fondos para la Compañía de Jesús y ayudó a jóvenes jesuitas mexicanos que estaban de paso para ir a España, buscando refugio debido al agravamiento de la Revolución.
Cuando regresó a México en 1918 fue asignado al templo del Sagrado Corazón, donde pintó su primer mural. Después fue asignado al Templo de San Juan Nepomuceno en Saltillo, donde pintó cuatro cuadros de 5 metros cada uno y otros dos cuadros de 2.5 metros para decorar los muros del templo.






Los dos retratos que acompañan este texto son obras que ejecutara el Padre Carrasco por encargo en la época de Nueva York y que datan de 1917

Adolfo Cantú
Colección de Arte Cantú Y de Teresa


sábado, 2 de enero de 2016




En  el Paris de las entre guerras – Federico Cantú
durante una década instale mi atelier en Paris, y fue ahí donde conocí a todo ese grupo de pintores y escultores españoles que frecuentaban a Pablo Picasso, todos eran mayores que yo , pero como digo me enseñaron andar tras las viejas y el alcohol,  fueron muchas tardes las que pase dibujando en el zoológico de Paris aprendiendo  la maravillosa técnica del dibujo de mi maestro y amigo Mateo Hernández